Amigos aventureros, preparaos para descubrir una joya oculta de Japón: Taketomi, situada en el archipiélago de Okinawa. Con sus playas de arena blanca, aguas cristalinas y arquitectura tradicional, esta pintoresca isla promete una experiencia inolvidable.
Lo mejor de Taketomi es que es fácilmente accesible con un coche de alquiler. Si bien este es un cambio de lo que estamos acostumbrados en México, donde la infraestructura de transporte público es extensa, aqui el coche de alquiler te dará la independencia y flexibilidad que necesitas para explorar todos los rincones de esta encantadora isla.
Al incluir un coche de alquiler en tu plan de viaje, asegúrate de seleccionar una categoría de vehículo adecuada. Si estás planeando visitar las playas más remotas, es posible que necesites un SUV o un coche con mayor poder. ¡Comparar precios en nuestro portal nunca ha sido más fácil!
Otra diferencia importante con México es el sistema de conducción de Japón, que sigue el modelo británico de conducir por la izquierda. También las señales de tránsito están en japonés, así que te recomendamos que te familiarices con ellas con anticipación.
Al igual que en cualquier lugar, encontrar un lugar para estacionar puede ser un desafío, especialmente durante la temporada alta. Sin embargo, la mayoría de los hoteles ofrecen estacionamiento gratis o por un cargo mínimo.
Kaiji y Kondoi son dos de las playas más conocidas de Taketomi, famosas por su arena estrellada y aguas turquesa. Son el lugar perfecto para relajarte y disfrutar del sol.
Pasear por las calles adoquinadas del pueblo de Taketomi es una maravilla. Aquí podrás ver las tradicionales casas de techo de paja Shisa y conocer a sus amables habitantes.
Independientemente de la época del año que elijas para visitar, Taketomi siempre tendrá algo que ofrecer. Sin embargo, al igual que en México, los meses de verano pueden ser muy calurosos y húmedos, por lo que la primavera y el otoño son ideales para disfrutar de la isla.
En Japón, la moneda utilzada es el yen. No olvides llevar contigo suficiente dinero en efectivo, ya que no todos los lugares aceptan tarjetas de crédito. En comparación con México, los precios pueden ser un poco más altos, pero vale la pena la experiencia.