A diferencia de las planicies de México, Manaos está rodeada por la espesa selva tropical del Amazonas. Así que prepárate para una aventura increíblemente exuberante. Este contraste con los paisajes de México proporciona una experiencia única que no puedes perderte.
Manaos tiene una amplia gama de terrenos, desde calles urbanas hasta carreteras rurales. Una recomendación para los visitantes es alquilar un vehículo con un buen rendimiento de combustible y resistente para las carreteras de la zona.
Manaos, siendo una gran ciudad, puede tener tráfico pesado en las horas pico. Sin embargo, los estacionamientos están disponibles en toda la ciudad y muchas atracciones tienen sus propios lotes de estacionamiento.
Al igual que en México, en Brasil se maneja por la derecha. Los límites de velocidad en las carreteras son de 60 km/h en la ciudad y de 80 a 100 km/h fuera de la ciudad. Es importante saber que las leyes de tráfico se aplican de manera rigurosa en Brasil.
La gente de Manaos es conocida por su hospitalidad y estarán encantados de compartir con ustedes su cultura y costumbres. A pesar de que el idioma oficial es el portugués, se puede encontrar gente que habla español en la mayoría de los lugares turísticos. Pero si puedes, aprender unas pocas frases en portugués será muy apreciado por los locales.
La moneda en Brasil es el Real (BRL). Aunque se acepta tarjeta de crédito en la mayoría de los lugares, se recomienda tener un poco de efectivo para pequeñas tiendas y vendedores locales.
Una de las mejores épocas para visitar Manaos es durante el Festival de Ópera de Amazonas en abril y mayo. Durante este período, la ciudad está llena de música y actividades culturales.
Al estar situada cerca del ecuador, Manaos tiene un clima tropical, con una temperatura promedio de 31°C durante todo el año, bastante más alta en comparación con la mayoría de las ciudades de México. Así que no olvides empacar ropa ligera y fresca, así como un buen repelente de insectos.
Manaos es el punto de partida perfecto para explorar el Amazonas. Ahí encontrarás majestuosos ríos, impresionantes cascadas, y la fauna única de la selva amazónica. ¡Así que abróchate el cinturón y a disfrutar del viaje!